Recuerdos de Vacaciones

Santa Clara de Cartagena, calentando motores para las vacaciones.

Quiero dedicar esta entrada a mis amigos colombianos, porque aturdidos por la crisis económica, por las amenazas de los vascos y atónitos por las genialidades del juez Garzón, los españoles están jodidos, necesitan un pocotón de recreo y no tienen gana de mamar gallo.

Con nuestra amiga y anfitriona en Colombia, la doctora Ángela María Gutiérrez y los Boteros en Medellín.

Asi, pues, ¿Qué tal? ¿Qué más? ¿Qué hubo? ¿Cómo les fue? En mi entrada de ayer "La puta Realidad..." comencé a contarles algo de la vuelta de vacaciones. Seguro que a los colombianos les resultó familiar. Se trata de impagable amabilidad de las aeromozas, taxistas y meseros españoles. Pero, ya lo dije y no conviene repetirse.

Hoy quiero dejar un recuerdo de aquellos con los que he compartido estos días.

El doctor Ortega que me llenó de vino la maravillosa guayabera de lino que me puse en la fiesta de gala de Cartagena.


Finca en Rio Negro. Medellín. Desayunando con Camilo, Sergio y Vicky, amigos muy queridos, excelentes anfitriones y expertos en caballos.

La gruta de la Virgen de los sicarios, no la de Sabaneta sino la de Medellín, en El Poblado, en la vía para Envigado. Siempre una veladora a María Auxiliadora, la Rosa Mística, la mundialidad.

Con Carlos y Magali, el querido matrimonio que inunda de bellas flores colombianas el mundo entero. En El Club El Nogal de Bogotá, justo en el comedor que demolió la bomba de las Farc.

El santuario de la rumba bogotana. El incomparable Andrés Carne de Res.

Alexandra y Eduardo, si no fueran excelentes médicos, serían los mejores contadores de historias de Bogotá.
Por favor, los que faltan en las fotos, ¡háganse ver para que les atienda!