Cuando Miguel Angel pintó los frescos del Génesis en la Capilla Sixtina no sabía que estaba proyectando la historia del siglo XXI. Este boceto de la época lo demuestra. El dios caribeño da vida a Adán, el HOMBRE venezolano. El dios Castro, apoyado en el angelote boliviano, toca con su dedo al Adán Chávez creado por la inspiración de Miguel Angel.
Tampoco imaginó el artista que siglos después, aleccionado por el dios, el HOMBRE sería un santo varón. Y que, entre uno y otro, convertirián las tierras de Cuba y Venezuela en REFVGIVM PECCATORVMque traducido del latin significa: países donde se entrenan los hijos de puta. ¡Cuánta razón tenía el presidente Uribe! Que Dios tenga en la mierda a Castro y Chávez.
20 comentarios:
Leyendo las palabras clave, y después de ver el cuadro, uno entiendo cómo aparecen en el mismo renglón Capilla Sixtina e Hijos de P... Genial, don Alfredo!!
Lástima que al séptimo día no descanse este tipo... Un abrazo!
AMEN.
¿Qué han hecho en Cuba y Venezuela para tener que soportar a estos dos tipos?
Ora pro nobis... Ora pro nobis...
Siga, no pare, que yo le canto la letanía porque estas plegarias parecen no tener fin.
Y que los cojan confesados a todos aquellos que aún creen en ellos.
Un abrazo.
Cada dia se supera D.Alfredo.
!!!ESTÀ USTED QUE SE SALE!!!
!!! GENIAL!!!
Qué triste que nuestro gobierno se preste a colaborar con semejantes tipejos, que ZP se preste a ejercer de monaguillo de Cstro y de Chavez. ¿Qué opinión tendrán de nosotros los venzolanos y los cubanos de bien?.
De todas las formas esta colaboración ETA-guerrillas viene ya de lejos, no hay más que darse una vueltas por las fiestas de Vitoria, Bilbao o San Sebastián y ver en la txoznas como aparte del apoyo al mundo radical vasco existe apoyo a los grupos radicales de Iberoamérica.
Saludos desde La Rioja.
Castro y Chávez
La herida y la amputación,
la piedra y la lapidación,
la tiranía y el tirano,
la tropelía y el tropel,
la rabia y el rabioso,
la maldad y el malvado,
la enfermedad y la epidemia,
la muerte y la mortandad,
la perfidia y el pérfido,
la náusea y el vómito,
la tiniebla y lo tenebroso,
la represión y el represor,
la mentira y el mentiroso,
la dictadura y el dictador,
la locura y el loco,
la cabra y el cabrón,
Chávez y Castro.
Hay hombres que han hecho y hacen tanto daño que no caben en una definición, ni en dos, ni mil, ni en dos mil. Hay hombres que se hacen, como cualquier maldición, eternos sobre los cielos de sus pueblos y las vidas de sus conciudadanos. Hay hombres que no caben tampoco en su condición, hombres hechos de deshechos de otros hombres, hombres que se nutren de hombres, hombres digo, por no ofender a las bestias, porque a ellas las califica el instinto, pero a estos sólo los distingue, sólo los anuncia en la torrencial sangría de la historia de la tiranía y los tiranos.
Cúmplase su ruego.
Reciba un fraternal abrazo.
Efectivamente D. Alredo:
Es por eso que yo muchas veces digo que Buenos Días nos de Dios a casi todos. Lo dicho.
Amigo García Francés,
Me he pasado un buen rato deleitándome con la forma tan deliciosa que tiene de explicar las cosas. Realmente la explicación que nos da, en cuanto a la forma, me ha impresionado muy gratamente.
En cuanto al contenido, pues, ¿qué quiere que le diga? Yo respeto sus opiniones todas, aunque no las comparta, porque, en cuestión de Ideologías, cada uno tiene las suyas, y las Ideologías son como las Religiones: es prácticamente imposible que uno pueda convencer a nadie.
Pero, repito, respeto sus opiniones y las de las comentaristas que ha habido hasta ahora, y, con certeza también, todas las que vengan.
Aquí le dejo una frase:
EN LA DISCREPANCIA ESTÁ LA RIQUEZADE HUMANOS ES ERRAR, PERO DE SABIOS ES RECTIFICAR.
Siga deleitándonos con sus exquisitas explicaciones.
Un cordial saludo,
Antonio Martín Ortiz
Cosas de la Informática:
Donde dije:
EN LA DISCREPANCIA ESTÁ LA RIQUEZADE HUMANOS ES ERRAR, PERO DE SABIOS ES RECTIFICAR
quise decir:
EN LA DISCREPANCIA ESTÁ LA RIQUEZA.
DE HUMANOS ES ERRAR, PERO DE SABIOS ES RECTIFICAR.
Celebro que le haya divertido la entrada, D. Fidelio.
Y desde aquí pido perdón al gran Miguel Ángel por la irreverencia.
Un abrazo, amigo mío.
Que Dios la cuide, Dª Lola. Ite misa est.
Con mi cariño, amiga mía.
D. Supersalvajuan, al pueblo cubano y al venezolano no se les puede culpar de nada.
Son dos pueblos alegres, creativos y generosos y son nuestros hermanos.
Un abrazo, amigo mío.
Dª Eva, usted y yo debiéramos cantar una misa en francés, al estilo de aquel progresista incomprendido, Monseñor Lefèbre.
Le mando mi cariño, amiga.
Favor que usted me hace, Dª Nazaríes.
Le agradezco mucho su afición a mis entradas.
Un abrazo muy grande, amiga mía.
A veces gobernar es ensuaciarse las manos. Al menos, eso nos dicen, D. Marcos.
Supongo que los cubanos y venezolanos, como nosostros, estarán lamentando la secta de políticos que tienen ellos y nosotros. Estoy seguro de que no nos culpan de nada a nosotros, al fín, somos hermanos y también víctimas.
Un abrazo, amigo mío.
PS. Lo de las castas de la fistas de Bilbao es de Juzgado de guardia. Veremos que hace Pachi este año.
D. José Alfonsousted hace la mejor y más bella definición:
"Hay hombres que se hacen, como cualquier maldición, eternos sobre los cielos de sus pueblos y las vidas de sus conciudadanos".
Es la tiranía de los usurpadores, su necesario perpetuarse.
Un abrazo, amigo mío.
Exacto, D. Carlos, entre el trigo siempre aparece alguna rata.
Abrazos, amigo.
D. Antonio, sus palabras de elogio me llenan de orgullo pero, al mismo tiempo me sonrojan por abrumadoras.
Bryce Echenique, viejo amigo de mi época parisina, solía repetir que "el elogio del amigo, por serlo, siempre es excesivo".
No recuerdo al autor de la cita pero creo que no era de D. Alfredo, ni siquiera recuerdo su literalidad.
Yo añadiría que el elogio en cantidades industriales dispara el amor propio y los muchos e inmerecidos elogios que usted me prodiga van a producirme una autestima que se derrumbará el día que usted no me los prodigue.
Vamos, que me va usted a convertir en un gilipollas endiosado y cuando tenga mono de su aprobación aparecerá el ídolo con pies de barro.
Y respecto a discrepar no se preocupe y discrepe, conmigo y con todo aquel que usted juzgue conveniente, D. Antonio, y, aunque yo le aviso que soy poco amigo de polémicas, siempre leeré con respeto sus opiniones.
Reciba un afectuosos abrazo, amigo mío.
UN ABRAZO MAESTRO
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