sábado, 17 de diciembre de 2011
Que se comen sus caballos, D. Cayetano
Señor conde, debe medir sus palabras porque los tiempos no están para GUASAS. Andalucía, y España, están llenas de ABSENTISTAS y LIBERADOS acogidos al ERE, al PER y al PAR(O). Pero también de familias DESESPERADAS por trabajar. Cayetano de Alba ha RECTIFICADO. Los de la azada han INVADIDO su casa. Querían comerse los potros.
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4 comentarios:
Pues no es mala idea lo de comerse los potros. Dicen por ahí que la carne de potro es muy exquisita.
Oiga, y ese tío, por muy Duque que sea, que rectifique lo que ha dicho, porque la tierra tiene que continuar siendo para el que "la trabaja", y mo, como dijo él, para quien "la hace producir", o sí, para el que "la hace producir", que es el mismo que el que "la trabaja".
El que nunca hace producir a la tierra es el Duque, por muy amo y señorito que sea.
Buenos días, Don Alfredo.
Antonio
D. Antonio, estos días prenavideños, debe estar usted Leyendo El Capital, el de Carlos no el de Groucho, porque se ha levantado incendiario.
Ya sabe usted que en esto vamos a diferir, amigo. La propiedad privada para mi es un derecho inalienable y ese rollo de "la tierra para el que la trabaja" es tan obsoleto como el feudalismo.
¿La tierra, el mar, la bolsa de valores y la banca, los hospitales, el ejército, todo para los que lo trabajan, la construcción de rascacielos? ¿Aunque no sepan que hacer con ello...?
No olvidemos que en el campo además de peones hay capataces, tractoristas, ingenieros agrónomos, técnicos, administrativos... y un dueño.
Abrazos, amigo mío.
Don Alfredo,
Yo me he levantado incendiario, pero Vd. se ha levantado con la más pura ortodoxia Capitalista.
Tenga Vd. en cuenta que, según los entendidos, la propiedad privada surgió en Roma, primero como "ocupación" del "ager publicus" [el terreno púbnlico], que luego, con el paso del tiempo, degeneró en "apropiación".
Quiere ello decir que el que tenía cien bueyes, o doscientas burras, para pastar, salía con ventaja respecto al que sólo tenía "una mula" para trabajar.
No obstante, respeto su opinión sobre la propiedad privada, aunque no la comparta del todo.
Que pase Vd. unas buenas Navidades y que sea Vd. feliz: yo procuro serlo más cada día.
Le envío un abrazo navideño.
Antonio
Y se queda usted corto, D. Antonio, ortodoxo es poco. Soy un ultraortodoxo, un taliban de la propiedad privada. Los del puñito en alto y el pañuelo palestino tratan de reeditar la estética del NOVECENTO de Bertolucci. Hasta la foto del asalto está copiada de la peli. Pura propaganda incendiaria. La cultura del cerillazo.
Le deseo toda clase de felicidades para esta Navidad, D. Antonio, maestro.
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