El cielo castiga al Maximizer. Sábado noche, un monumental mareo incapacitó a tres miembros de la tripulación no suficientemente amarinados. Domingo, cambiamos el rumbo y retrocedimos para atracar en La Palma por una avería eléctrica. Delante el gran Océano nos espera. Humildad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario