Estaré cazando osos Kodiaks por el sureste de Alaska

Perdonen que me vaya sin avisar pero las despedidas me gustan menos que las torpes declaraciones de Dª Bibiana y prefiero el ataque de los Kodiak antes que soportar más paridas de la señora Pajín. Simplonas.

Para quienes ya estén de regreso en el andamio les deseo una vuelta al tajo no demasiado dura, que salgan ya de la maleta y afronten corajudamente la dura realidad. Pueden ser despedidos y quedarse sin curro antes de perder el bronceado. Estamos de ellos hasta ahí mismo pero seguimos teniendo un gobierno de locos.

Para los que aún están fuera, deseo que vuelvan radiantes después de las vacaciones pagadas con sus tarjetas de crédito ya semicalcinadas. Espero que regresen saciados de sexo duro, de tinto de verano helado, de paella pasada y con ánimo de seguir blogueando. Porque aquí, se ha acabado la juerga y vienen tiempos muy chungos.

Menos para los ganadores de la "Ola de la ONCE", ésos, ¡estarán excusados de rozar un teclado y las próximas Navidades serán los únicos consumidores!


Mientras tanto, suerte, vista y al toro, queridos míos. Un abrazo grande para todos, gracias por su colaboración y hasta muy pronto, amigos.