Porque, aquí nunca pasa nada. Los estudiantes, por serlo, tienen licencia para insultar, agredir y reventar un acto en la Universidad. También se romperán urnas en los Ayuntamientos y se acosará en las puertas de los hospitales.
Pero, en cualquier momento, ocurrirá una desgracia. Un loco, o un hijo de puta, tendrá la oportunidad de agredir a alguien. Y no la desaprovechará. Las autoridades académicas son responsables de mantener el orden en la Universidad. ¿Por qué no actúa la Justicia? ¿Por qué los fiscales no persiguen el delito?
Seguramente alguien desea que estos grupos de choque resuciten el viejo pistolerismo estudiantil y, lo malo, es que acabará por conseguirlo. En la próxima agresión, además de proteger a las personalidades, por favor, que haya detenidos. Que pasen ante un juez y que juzgue si esas mulas pueden seguir conviviendo entre los universitarios. Multas, expulsiones, protección a la libertad de expresión y castigo a los que no la respeten.
No pasaría nada. Pese a quienes decían que iba a recrudecerse se controló el terrorismo callejero en Bilbao y San Sebastian. No pasó nada. ¿Por qué tanto guante blanco con los salvajes en otras partes de España?
8 comentarios:
Don Alfredo,
Yo le voy a explicar el motivo de que pase todo que denuncia Vd. Aquí, en este país puesto patas arriba ya no existen estudiantes: los que van a la Universidad, en una buena mayoría, no van a estudiar, van a hacer prácticas de vagancia y buena vida, a que les aprueben las asignaturas por la cara, sin el más mínimo esfuerzo. Es que, como ya se regala casi todo en las llamadas Universidades, lo mismo que en los Institutos de Secundaria, los estudiantes no estudian, los estudiantes tienen otras preocupaciones, como son el botellón y la holganza. Y, claro, en algo tendrán que pasar el tiempo: en impedir que los demás opinen libremente, en obstaculizar que los que realmente quieren contrastar ideas, se enriquezcan con las ideas de otros, que, en general, saben mucho más que ellos. Aquí ya no se puede ser de Izquierdas, ni de Derechas, porque los Partidos Políticos ya no existen. A esto que se le llama Democracia habría que nombrarlo con otro nombre (redundancia obligada).
A la que uno intenta dejar de ser un borrego y ser políticamente correcto, se le ponen palos en las ruedas, se le critica como esto o lo otro, y lo de más allá, Estamos en un País en el que no existe la libertad de expresión: aquí predomina la Ley del que más ruido hace, del que se cree en posesión de la verdad, con exclusión de todas las demás opiniones.
Yo, por devoción y también por Formación, me vuelvo a la Grecia Antigua que, comparada con lo de ahora, tampoco estaba tan mal. Allí nadie reventaba las tertulias ni las lecciones magistrales.
Reciba, Don Alfredo, mis habituales respetos.
Antonio
Mientras no se atente contra alguien afín al partido que está en el poder (sic), estas cosas se relativizan hasta tal extremo que producen náuseas. Se lamentan y se condenan, sí, pero nada más. Hasta el día que pase algo, hasta el día que a alguno de estos jóvenes energúmenos se le vaya la mano y la prensa tenga que contarlo en la sección de sucesos. O en la de las esquelas.
¿Cómo se llega hasta donde nos encontramos hoy? Pues resulta terriblemente sencillo. Si no se pone un tope, aquello que resultó ser un simple abucheo va rodando como una bola de nieve y engordando. ¿Que reventamos un acto y no nos pasa nada? Pues el próximo día, el doble.
Saludos.
Desde luego la entrada pone los pelos de punta. En vez de "quemar" el ministerio de trabajo después de oír declaraciones como las del ministro: "yo me haría un plan de pensiones"... Está claro qué sectores son movilizables (léase manipulables) en este país (¿España?). Todo tiene su lógica: los organizadores de las protestas y algaradas no tienen que trabajar pues disfrutan de la subvención de turno que les conceden aquellos que los movilizan. Todo cuadra! Viva Beria!
Argumenta Ud. con genio e ingenio, los espacios de impunidad no son nunca inocentes, arde en ellos el odio que anida en el corazón de todas las voluntades autoritarias, en eso no hay color, pese a que no cesen unos y otros de pintarrajearlas hasta la náusea.
Tenemos el deber de enfrentarnos a quienes no se conforman con tener un modelo vida para nosotros sino que además intentan imponérnoslo.
Ocurre, que como le decía, detrás de estas bestias en celo ideológico se esconde el fanatismo autoritario de turno, en España a día de hoy la extrema derecha se refugia rancia en el futbol, en el han hallado consuelo y patria, la extrema izquierda vive a caballo entre la fascinación del poder en ejercicio y la perplejidad de no ejercerlo como se debe. Y la tercera pata, la del nacionalismo, campa a sus anchas en las Taifas disfrazando sus viejas ideas xenófobas y racistas de sano amor a la patria y al marxismo. Todas ellas tienen sus escuelas, sus maestros, sus medios de propaganda, sus fuentes de financiación y sus intereses.
Desenmascáralos nos es sencillo, no en vano la mano que mece la cuna donde dormita la sierpe coincide en ocasiones con la del que gobierna o aspira a hacerlo.
La tropa política se ha dado a la barbarie e incapaces de crear ilusión engendran drama, quizá, y tómelo como una ingenua metáfora, debamos hacer como aquellos buenos hombres del relato “Ragnarörk” de Borges que a la vista de la degradación que habían sufrido los dioses se ven en la necesidad de matarlos. Narra él: “Todo empezó por la sospecha (tal vez exagerada) de que los Dioses no sabían hablar. Siglos de vida fugitiva y feral habían atrofiado en ellos lo humano; la luna del Islam y la cruz de Roma habían sido implacables con esos prófugos. Frentes muy bajas, dentaduras amarillas, bigotes ralos de mulato o de chino y belfos bestiales publicaban la degeneración de la estirpe olímpica.” Para continuar esplendido en el final: “Sacamos los pesados revólveres (de pronto hubo revólveres en el sueño) y alegremente dimos muerte a los Dioses”.
Quizá sin llegar al extremo debamos examinar a nuestros dioses y a sus sacerdotes, par más que encarnen unos la esencia de la democracia y los otros la de la juventud, vigilarlos digo, para entender al menos con quien nos la estamos jugando.
Un fraternal abrazo.
Comandantee!!
No se alarme, esto no es ná. Espere a ver cómo se recrudecerá la cosa si los más pendejos de los empresarios liberales continúan haciendo propuestas escalofriantes e insultantes a los burritos-trabajadores-esclavos. Ahora mismo estamos como agilipollaos con la que está cayendo...pero llegará el día en que alguien le pegue una patada en los güevos al próximo listo de turno que proponga un contrato sin contrato ni sueldo ni seguridad social y jubilación a los 70...por el bien común. Lo de la Bastilla va a ser una escena de los playmobil comparao con la que vamos a montar!!
Y es que si bien los sociatas la han cagao estrepitosamente, una vez más, no andan a la zaga, en oportunismo y mala hostia, esos economistas "liberales" macarras que están viendo el cielo abierto para vendernos su mierda elitista pre-esclavista. Esos mamones también nos están metiendo el dedo por salva sea la parte...a todos.
Y pensaba yo que tendría una vejez tranquila..jaja...Me veo ya encargando un trajecito al Colombiano y descargándome la receta del cóctel...Molotov!!!
Saludos a la Nafta!!
Como está el patio..Si no se respeta como se pueden dar luego consejos de como actura? Tenemos que parcticar con el ejemplo...Un feliz fin de semana querido amigo...
Venga, venga, no nos pongamos así, la Universidad es un espacio de libertades, dejen ustedes que los chicos se expresen, para una vez que protestan por algo....
ESOS HOMBRECILLOS NO SON ESTUDIANTES PUES UNO QUE ESTUDIA APRENDE Y COMO SE VE ESTOS TIPEJOS AÚN NA DE NA
ABRAZO MAESTRO
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