Todos los rituales tienen su liturgia y el vino no es una excepción. Desde el amoroso degüelle, pasando por el descorche, el sonido del vino al caer en la copa, el color y la explosión de matices olorosos en nuestro cerebro, todo contribuye a la satisfacción final del amante del vino. Aunque no todos ustedes sean amantes de la enología, hay algo en su liturgia que no les dejará indiferentes: el vocabulario.
Resulta extremadamente difícil acertar con la palabra exacta para definir lo que percibimos en nuestro cerebro cuando catamos un vino. Por ello antes de ninguna otra cosa quiero repasar alguna de las palabras indispensables en la cultura del vino.
Ahogado (En gallego abafado): Vino resultante de la adición de alcohol puro de vino.Abierto: Vino que tiene poco color y poco brillo en boca.
Abocado: Vino moderadamente dulce.
Acerado: Color pálido de brillos metálicos característicos de algunos vinos blancos.
Acerbo: Vino ácido, áspero al gusto.
Acídulo: Ligeramente ácido.
Afable: Vino suave y de paladar agradable.
Afrutado: Vino que desprende aromas de frutas. Si presentase aroma de albaricoque, es síntoma de delicadeza.
Alegre: Vino vivaz, de buen color, de aroma limpio y fresca acidez.
Almizcrado: Que presenta aroma a almizcre.
Ataque: Primera impresión sensorial que el vino produce en el paladar.
Mi vino de la semana: Cuñas Davia Barrica. Sobre sus lías durante 6 meses. 80% Treixadura, 20% Albariño. De color amarillo paja, dorado, muy brillante. Complejo y elegante. Hablaremos de este vino de autor en la siguiente ocasión.
26 comentarios:
Muchas gracias por enriquecer el trabajo, Sr. Francés, reconozco que no es mi post más trabajado, pero había que empezar por el principio. Muy guapo Emilio el enólogo de Viña Costeira. Él fue quien impartió el primer curso de cata al que asistí. ¿Le conoce usted?
Durante todo el día, nuestros sentidos están despiertos: miramos, escuchamos, tocamos, olemos y saboreamos. Nuestros órganos sensoriales registran los estímulos olfativos, auditivos, visuales, táctiles y gustativos de nuestro alrededor sin que seamos realmente conscientes de ello. Sin embargo, cuando realizamos una cata, procuramos analizar y memorizar conscientemente el mayor número de sensaciones que el vino nos transmite para poder, de este modo, aumentar nuestro placer y nuestro conocimiento. Contrariamente a lo que se piensa la cata de un vino puede ser fácil.
De entre todo el vocabulario me quedo con una palabra,que no aparece en este glosario,huella,o sensación,o emoción que se puede sentir al realizar una cata.
Seguro que este Albarino al ser un vino blanco tiene aromas frutales,cítricos...
Lo apunto para mi futura bodega...
¿¿¿La copa para servir este vino como debe de ser D.César???
Jo D. Cesar lo que tengo que aprender, lo mio es jod.. que bueno o coñ... esto esta para aliñar ensalada, ¡¡si es que soy algo cateta!!.
Me alegra que usted haya entrado en nuestras vida asi la proxima vez me comportaré y ante uno de mis albariños favoritos "Terras Gauda" dire al ataque cuando saboree su primer sorbo.
Gracias por brindarnos su sabiduría
Señor Francés a usted le toca el convite.
Buen finde
me gusta el vino, aunque he se decir que no soy para nada una conocedora de este caldo, tampoco me gustan todos, si lo pruebo y mi paladar logra captar su esencia ese es el que bebo, también debo decir que no siempre el mismo vino en ocasiones diferentes me es agradable por eso bebo cuando el cuerpo lo tolera, saludos.
Dña Nazaríes, catar puede ser fácil pero descubrir más de cuatro sensaciones distintas en una misma cata resulta harto difícil. De hecho, se estima que sólo una entre un millón de personas puede conseguirlo y de entre ellas el 99%son mujeres. Tengo pensado un post, que le dedicaré, en donde su querido Chateau D¨Yquem, en una cata a ciegas es vencido por un plebeyo de no más de 35 euros.
Y no me tire de la lengua en cuanto a la copa, pero yo las prefiero esbeltas. Las copas.
Perdón, Dña Nazaríes, el vino que le presento es un Ribeiro de Autor que ha fermentado sobre sus lías en barrica de roble francés. Lo conocerá más a fondo en el próximo post, siempre que el Sr. Francés no me haya rescincido el contrato...
Dña 40añera, buen gusto tiene usted para el albariño. En esa zona de El Rosal, el Albariño amansa su acidez con la uva Loureira y Lado consiguiendo un bouquet más suave. Cuando ataque, no se olvide de si tiene que conducir..
Dña margarita, efectivamente cada cual ha de buscar aquel vino que mejor se adapte a su gusto. Aunque yo prefiera educar el gusto, para disfrutar de más gamas. No sé si me dice que no conoce el caldo que le presento; no se extrañe, es un vino de un pago escondido en el corazón del Ribeiro. Le hablaré de él en el próximo encuentro, haciendo la misma salvedad anterior..
Don Cesar, soy una enamorada de los vinos, un desarrollo de los sentidos y una manera elegante de festejar algo. Los tintos son mis favoritos y antes no distinguía uno de brick con uno normal. Ahora, a base de probar, en casa no entran más que aquello que yo, humildemente, considero buenos. Su vocabulario me ha enganchado.
Besos
Moooola!!
...pero...y qué gaseosa nos recomienda para la mezcla...de limón o blanca???
;)
D. César, su glosario y la entrada ya venían tan enriquecidos como el caldito Avecrem de Gallina Blanca.
No conozco a su amigo D. Emilio, ya le he comentado alguna vez que mi relación con el vino es tan torpe como para, cuando me sirvieron un fino en las bodegas Domeq de Jerez de la Frontera, pedir una coca cola y hacerme un calimocho.
Vale, ya sé que es un crimen y que se quedaron aterrados, pero entonces tenía 23 años y era rebelde. España y yo somos así. Lo siento, damas y caballeros.
Coño, a ojos del profano que soy, parece que usted aprende cada día más sobre el morapio, Dª Nazariés.
Incluso se está pensando organizarse "une petite cave". Bueno, ya nos recomendará usted algo para acompañar sus guisos, Doña.
Abrazos, amiga mía.
Ha elegido mal anfitrión, Dª 40Añera, ya le digo que soy un manazas para el vinorro.
Se arriesga usted a que la convide a un "peleón" cosecha para comedor de la Legión.
Muchos abrazos, Doña.
Dña Rosalía, veo que usted va por el buen camino en lo que al disfrute del vino se refiere. Efectivamente, tengo un amigo que dice " el blanco es blanco y el tinto es vino."
No obstante el vino blanco se va abriendo paso y realmente no hay que despreciarlo.Por su frescura es ideal para el estío, al tiempo que es indispensable para algunos manjares de los que en Galicia tenemos en abundancia.
El vocabulario es una parte del que existe. Continuará.
Dª Margarita, ¿y unos mojitos ricos? Un saludo, amiga.
Tranquilo, D. César, que tiene usted el contrato indefinido más asegurado que Belén Esteban.
Un abrazo, querido.
Don Atila, sé que usted habla medio en serio medio en broma, pero tengo un amigo con el que he comido hace unos días que bautizó con gaseosa un mencía de Ladairo con el que comíamos. Estuve a punto de retirarle la palabra, pero soy una persona sociable y ambos acabamos riéndonos. A usted no le retiraré la palabra, pero le recomiendo que aprenda a moderar sus instintos con la gaseosa...y saboree el vino español a pelo, aunque sólo sea para contribuir a paliar la crisis de los bodegueros que no consiguen sacar el vino de sus bodegas.
Lo que espero obtener de ud, a quien dios guarde muchos años!
Haga como yo, Rey de los Hunos, ¡todo por el Imperio! Póngale cocacola y hágase un botellón de calimocho...!!!
Abrazos, guerrero.
Dª Lía, ¿no le he dicho nunca que tiene usted la misma preciosa nariz que le dibujan a Cleopatra en los cómics de Astérix?
Espero que lo tome como cumplido respetuoso y no como impertinencia, pero, adoro la foto de su perfil. Está usted muy linda, amiga mía.
Bueno D.César le cuento aquí algo que le dije en mi blog que le iba a contar,pero que no he tenido ocasión de contarselo,así que aprovecho este Encuentro, ahora que no nos oye nadie para decirle esto:
Hace unos cuantos días tuve la oportunidad de pasear por tierras logroñesas,como es lógico pude contemplar los magníficos viñedos que adornadaban el camino de los peregrinos,algo precioso,sin duda.
De visita a un pueblecito bastante rural,además de meterme en un corral a fotografiarme con un rebaño de ovejas,tuve la gran suerte que una señora muy amable me enseñase su BODEGA.En este pueblo casi todo el mundo tiene bodega,pero lo que yo vi me dejó sin palabras.
Se accedía por una puerta bastante corta de altura y se accedía a una cueva donde había cientos de utensilios bodegueros y algunos con bastante antiguedad.
El olor a madera de las barricas se mezclaba con el aroma del vino fermentando, y el propio olor que puede desprender el estar bajo tierra.
Fué una visita inolvidable, pero sobre todo fué inolvidable el tremendo dolor de cabeza que me causó tomarme una taza de vino a las cinco de la tarde,no podía despreciar poder catar el vino casero de esta familia.
Una lástima que no pude inmortalizar esta visita bodeguera porque mi "mardita cámara" se había quedado sin batería., la gasté con las cabras.
En fin solo eso, lo quería compartir , ya que como amante del vino , se que hubiese disfrutado tanto como yo de haber visto esta preciosidad de bodeguita.
Un saludo.
Ayyy D.Alfredo que todavia lo he saludado a usted...se me había olvidado con tanta borrachera!!!!
BESOS.
Amigo, eso que le ha dicho a mi chica un ilustrador que quería dibujar su perfil...ja,ja,ja... es que es vasca mi niña...a mí el vino me marea, el alcohol en general me sienta muy mal, mi organismo lo rechaza. Ni emborracharme puedo, que desgraciada soy. Pero admito que esta entrada de Don Cesar es atractiva. Don garcía, si algún día coincidimos me invita a un zumito de naranja, como el Finisterre ese de la peli de Paco Martinez Soria...je,je,je...
40añera,
Joder y coño! Dígalo o escríbalo sin miedo, son palabras también!
¿O es que la lengua se ha de avergonzar de algo? Claro que no, coño!
Si al final están las ideas, ¿por qué evitar las palabras? Mientras que no sea algo muy feo...
En fin, creo que escribiré una entrada sobre este tema en +Idioma.
¿Qué le parece, Señor A.G.F.?
Saludos
Dª Nazaríes, gracias por acordarse de mi y por esa bonita historia de la bodega riojana.
Y, siento mucho el pedo que agarró, Doñita.
Mis cariños para usted, amiga mía.
Es que su esposa, Dª Norma, tiene un perfil que enamora pero, ¡qué le voy a decir a usted!
No tema, cuando un día vayamos de tapeo, ni tocar el vino, ¡sólo roncitos!!! Es broma, Doña.
Muchos abrazos, amiga mía.
Dª Airama, me parece estupendo que dedique una entrada a los tacos que usamos los españoles con inaudita prodigalidad... y que tanto asombro despiertan en nuestros amigos de Hispanoamérica.
Será una entrada perfecto, Doñita. Mis abrazos, para usted.
Publicar un comentario