Sería difícil exagerar la importancia de la libertad humana en todos los órdenes de la vida. Desde la libertad de pensamiento y expresión –el libre ejercicio de la razón– hasta la libertad de acción, incluyendo en ella, por supuesto, la libertad económica; desde las concepciones más sublimes de la inteligencia, hasta los actos más humildes de la vida cotidiana; todas sus modalidades son decisivas para garantizar la dignidad de la vida humana.
La libertad pertenece a la esencia de la condición humana, constituye algo propio y exclusivo del hombre en el reino de la naturaleza. Sin respeto a la libertad y a la dignidad humana no puede haber vida que merezca la pena. La defensa frente a los temibles poderes a los que se ha de enfrentar irremediablemente, no es posible sin el ejercicio de la libertad moral, sin una pasión ética por la libertad.
Esta pasión, esta fuerza, que constituye la raíz del liberalismo, y que se caracteriza por una especie de heroísmo ético, pues siempre encuentra enfrente otras numerosas y superiores fuerzas o pasiones, es virtud particular de una minoría de hombres.
«Escribo –dice Antonio García-Trevijano– para influir con ideas en la cristalización de un tercio «laocrático» de la sociedad en torno al núcleo más sensible y valiente de la comunidad. Este tercio más inteligente está al cabo de la calle del carácter incorregible de la partitocracia. Pronto tendrá que emprender la conquista de la libertad política, para llegar a la democracia por la vía de la reforma radical de esta corrompida oligarquía de partidos.»
17 comentarios:
Para nuestra desgracia, no veo el arrojo ni el valor necesarios para llevar adelante esta propuesta más que en una ínfima minoría.
La inmensa mayoría sólo aspira a un puesto de funcionario y a ver el partido del domingo.
Mientras haya hombres como Antonio García habrá esperanza. Pero quedan tan pocos...
Saludos, Don.
Querido Aspirante:
Estoy convencido de que esta minoría con disposición laótica será la que promueva la conquista de la libertad política para todos, incluidos funcionarios y televidentes.
¿Se considera Vd. parte de ella?
Pues sea bienvenido y súmese a esta causa tan necesaria para España.
Un fuerte abrazo.
Querida Mercedes:
También se necesitan mujeres.
Sea bienvenida.
Le advierto que la causa de la libertad es muy adictiva cuando se descubre.
Un fuerte abrazo.
Querido don Alfredo:
¡Muchísimas gracias por alimentar ELDEBATE!
Y también por las fotografías tan apropiadas.
Un fuerte abrazo.
D. Aspirante, yo también soy tan pesimista como usted pero gracias a gente como D. José María, de vez en cuando, respiro un sorbito de aire fresco.
Un abrazo, amigo mío.
Espero que sigamos sus buenas enseñanzas, aquellas que nos trae, infatigable, el Sr. Aguilar, Dª Mercedes. Pero dudo, Doña, dudo.
Gracias, D. José María, se está convirtiendo usted al 50% en nuestro faro, y el otro 50%, en nuestra biblioteca de Alejandría.
Encantado de ayudar y, aún dudando, siempre a su disposición, amigo mío.
Don Alfredo, solo la alegría de vivir, el amor a la realidad
y el optimismo pueden impulsarnos a participar como conciencia personal y política dentro de la sociedad para promover los cambios morales, culturales y políticos tan necesarios en este momento histórico.
Hay verdadera hambre de una nueva cultura integradora y de un renovado orden político que puedan devolver al hombre actual el equilibrio y la serenidad que ha perdido durante esta crítica Edad Contemporánea.
Mas hay muchas personas, entre las que yo le sitúo a Vd., que colaboran activamente en esta extraordinaria causa de rescate de la humanidad toda.
Solo que como la tarea es grande se necesita un número elevado de personas, no más de un tercio, llenas de ilusión y determinación.
En vez de quejarnos, asociémonos en pos de este elevado ideal.
Reciba un agradecido e ilusionado abrazo laótico y laocrático.
Y otro normal, igualmente cariñoso.
Mr Aguilar!!
No creo que la libertad forme parte de la esencia humana. Nacemos y vivimos oprimidos por tantos y tan variados condicionantes que esa libertad no es en realidad más que un constructo ideal...sin fundamento terrenal.
A lo sumo, podría llegar a aceptarle que la libertad, más bien las libertades, pudiera ser una conquista...aunque tan efímera como la voluntad y energía que la humanidad ha puesto en cuidarla y respetarla.
PD: Mi gato ha protestado enérgicamente ante su aseveración de que la "libertad es algo propio y exclusivo del Hombre"...luego me ha soltado una mirada sarcástica y una sonrisa...compasiva...como diciendo ¡¡"seguid soñando"!!. Se ha girado irguiendo la cola...y me ha mostrado ¡¡todo el esplendor de su ano!!. Debe de saber algo que nosotros ignoramos. ;)
Un saludo!!
Queridísimo don Atila:
Creo que hasta para negar la libertad hay que ser libre.
Y es cierto que la libertad es paradójica y muy frágil.
Por cierto, qué gato tan listo y maleducado tiene Vd.
Un grande y libre abrazo.
Pues la libertad y dignidad nos la han pisoteado de nuevo.
Un par de noticias de hoy:
“En Cataluña otorgará rango de autoridad a los directores de colegios para fichar, despedir y multar a los maestros”
“Bancos y cajas de ahorros elevan sus comisiones por mantenimiento de cuentas corrientes y de ahorro como por el de las tarjetas de débito y de crédito, así como por la apertura de los préstamos hipotecarios, según un informe del Banco de España”
Los profesores no tenían bastante en soportar las amenazas e incluso agresiones de alumnos y padres chulos, que ahora encima deberán soportar el caciquismo de unos directores nombrados a dedo y con poder suficiente para putearlos.
¿Quién despedirá, multará o fichará a los directores de los colegios si ellos son los que lo hacen mal?
En cuanto a los bancos, son ellos quienes tienen libertad para seguir robando, partir de ahora los ahorros debajo del colchón, como hacían nuestros abuelos, y a los banqueros, que les vayan dando por el cerito sexual.
Lamentablemente la libertad sigue en retroceso.
Saludos acojonados.
Me decían en el colegio en donde estudié que la existencia de Dios se demostraba fácilmente. O existe o no existe. Si existe ya no hay nada que demostrar . Y si no existe...¿pero hombre, cómo no va a existir?
La libertad, como el valor al soldado se nos supone. Si la tuviéramos, querido Sr. Aguilar, no estaríamos en estas lides intentando conquistarla.
Usted ilústrenos sobre esa teoría y en donde podemos seguirla, cual es su catecismo, cuáles los sacrificios que se nos piden...!haga usted proseletismo, hombre!
Los lectores de D. Alfredo ya casi conforman el tercio necesario!
Saludos.
Señor Aguilar, intento desde la prudencia no idealizar a la libertad aunque solo sea por mantener un sano escepticismo, parece que ninguna fe nos ha librado nunca del fanatismo y sospecho que tampoco en esto sería aconsejable.
Que tiene usted más razón que un santo, sin duda.
No me incluyo en ese tercio sensible y valiente aunque admiro la inteligencia y valentía de D. Antonio.
Creo que somos una sociedad puberal que ni valora la importancia de la libertad ni sabe muy bien qué hacer con ella. No estoy seguro de si lo que necesitamos es tiempo para crecer o que la vida nos dé alguna reprimenda. Por el momento seguiré intentando aprender de las personas con las que, como usted, comparto inquietudes.
Un admirado saludo.
Querido don César:
La libertad esencial del ser humano es la llamada libertad individual o personal y está siempre amenazada por el orden social, aunque este es necesario e inevitable hasta cierto punto. Es una de las paradojas de la libertad.
La otra libertad del ser humano es la llamada libertad política o libertad colectiva, de la que carecemos, y es la que nos permite intervenir a todos en la gobernación del Estado.
Pero ambas están relacionadas. Siendo la primera la decisiva, no puede desarrollarse debidamente si no existe la segunda.
En realidad la libertad es un conjunto de libertades interconectadas y todas son importantes.
Y debemos luchar por todas.
¿Por qué no prepara Vd. una entrada sobre el tema?
Un abrazo.
Querido Javier:
En efecto, la libertad no debe idealizarse y no debemos creer que está garantizada, sino que hay que luchar por hacerla cada día más amplia hasta donde el necesario orden social lo permita y aconseje en cada momento.
Ahora estamos muy cortos en mi opinión, cortísimos si de libertad política se trata.
La actual organización de la libertad, pues de eso se debe
ocupar la política, teniendo en cuenta las condiciones reales de la sociedad actual, exige la sustitución de la
Monarquía de partidos por una República Constitucional.
Ni más ni menos.
Un abrazo.
Querida Empar:
Entre las libertades, las económicas son importantísimas.
Y es cierto que se hallan amenazadas.
Vd. señala muy bien alguno de sus peligros por abuso o coacción de los poderosos.
Un abrazo.
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