Zapatero, escondido durante el conflicto laboral más grave vivido en España (anormalidad) , igual calló Rajoy salvo por unos ligeros dengues aeroportuarios, salda la crisis con un formato parlamentario ridículamente comprimido (anormalidad). Grotesco final político para esta farsa preñada de dislates que ahora continúan los controladores en el espacio jurídico.
Para el Gobierno de España, el recio estado de Alarma (anormalidad), producto de su bravucona impotencia (anormalidad) y del vandalismo poligonero de los controladores (anormalidad), sólo ha merecido un debate en el Congreso (anormalidad) de 10 minutos each one. El miércoles, en sesión de control, comparecerán Blanco y Rubalcaba, y se escamoteará (anormalidad) la presencia de la ministra Chacón, y del ministro Sebastián.
Desde el principio apoyé las medidas (anormalidad) para abrir el espacio aéreo español. Me inquietó el daño, económico y de imagen, que los amotinados causaran a España. Pero, desconfié cuando Rubalcaba indicó que el estado de Alarma podría prolongarse (anormalidad). Me disgusta que nos gobiernen a decretazos (anormalidad) y prolongando las medidas extremas (anormalidad). Y menos, que lo haga un partido en estado comatoso y, según las encuestas, con un pie dentro de la fosa y cuyo lema podría ser: "tarde, mal y nunca".
Zapatero lo aclara con una frase únicamente válida en Venezuela: "Ni un día más ni un día menos" (anormalidad). Palabras tan necias como las de Pajín: “Sólo faltaría que la ministra no pueda nombrar a quien le salga de los cojones” (anormalidad). Entretanto, el paro es la primera preocupación para cuatro de cada cinco españoles, los controladores resisten no declarando, hay amenazas de “movilización permanente” (anormalidad) en los aeropuertos, Arnaldo Otegui es un pan bendito y seguimos arruinados mientras el gobierno no reacciona ante los moros (anormalidad). No soy jurista ni constitucionalista, tampoco se ponen de acuerdo entre ellos, pero creo tener algo de sentido común. ¿Esto es normal?
viernes, 10 de diciembre de 2010
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32 comentarios:
Pero...¿es que alguna vez ha habido normalidad?
Besos
Nela
La anormalidad del mal sueño. La anormalidad de vivir en la cuerda floja. La anormalidad de comtemplar cómo medianías toman (creen tomar las riendas de las decisiones estratégicas). La anormalidad de soportar día tras día la estulticia institucionasl e institucionalizada. La anormalidad de vivir en el autobombo mentiros y en la mentira insultante.
No podemos seguir así ni un minuto más.
Abrazos, amigo mío.
Añádale que les paga la inseminación a los etarras para que se reproduzcan, en lugar de procurar la extinción de la especie.
Para salir corriendo a las antípodas.
Cambiar vacaciones por derechos, no puede ser bueno, porque algún día serán los nuestros la moneda de cambio, el arrugado bañador, la mustia cámara fotográfica, los tres días de fiesta…
Los controladores puede que sean el delito, pero no el delincuente, sin embargo han sido ellos los que han sido castigados, ellos los criminalizados en una pirueta memorable de desmemoria política. Porque a día de hoy es a ellos a quienes se les va a juzgar por lo civil, lo penal y lo militar, pero se va a juzgar a alguno de los que permitieron esos privilegios, creo que no.
La anormalidad el cuarto supuesto de suspensión de derechos y deberes. El que olvidaron los ponentes constitucionales, el que no se declara sino que se enmascara cada día.
Ud. amigo ha desvelado en un certero soplo de sentido común el plano secreto de lo intolerable con que conjuramos lo tolerable y también la intolerancia.
Reciba un fraternal abrazo.
La anomalía es norma y normal en Hispanistán.
Un día dije que viví lo mejor que puede ofrecer una dictadura y que estoy viviendo lo peor que puede ofrecer la peor democracia posible.
Un abrazo y que 'dios nos pille confesados'.
Tiene usted toda la razón, Dª Nela, la cosa siempre ha estado chunguita.
Un abrazo, amiga mía.
D. Rogelio, ésa es la conclusión, así, anclado en la incertidumbre y la falta de proyecto común, no pude vivir ningún país.
Un abrazo muy fuerte, querido.
D. Aspirante, no tema debe ser un proyecto secreto de Sanidad/Interior de programar cruces genéticos para producir híbridos no agresivos a su especie.
Espero acertar, amigo mío.
D. José Alfonso, me ha recordado aquello tan conocido de Maiakovski, copiado (inspirado) después por Bertold Brecht:
En la primera noche, ellos se aproximan
Y recogen una flor de nuestro jardín
Y no decimos nada.
La segunda noche, ya no se esconden,
Pisan las flores, matan nuestro perro
Y no decimos nada.
Hasta que un día, el más frágil de ellos
Entra solito en nuestra casa, nos roba la luna, y
Conociendo nuestros miedos,
Nos arranca la voz de nuestras gargantas
Y porque no decimos nada
Ya no podemos decir nada.
Maiakovski:
Primero se llevaron a los negros
Pero no me importó
Porque yo no era negro
En seguida se llevaron algunos obreros
Pero no me importó
Porque yo no era obrero.
Después prendieron a los miserables
Pero no me importó
Porque yo no era miserable
Después agarraron algunos desempleados
Pero como yo tengo empleo
Tampoco me importó
Ahora me están llevando a mí
Pero ya es tarde
Como no me preocupé por nadie
Nadie se preocupa por mí.
Bertold Brecht
Un gran abrazo, amigo mío.
Me encantan sus comentarios, D. Carlos, he visto pocos blogueros más pesimistas (realistas) que yo.
Usted me gana por una cabeza. La suya.
Un abrazo, amigo mío.
Remedando sus palabras, Sr. Francés, he visto a pocos blogueros más optimistas que yo, aún así digo que las libertades se nos vienen cercenando-tímida y solapadamente-desde hace tiempo. Esto que está ocurriendo es tan palpable que lo notamos; por palpable no es lo más peligroso. Está a la vista de todos y el mundo está pendiente. Me preocupan los derechos que se pierden imperceptiblemente y que usted expresa, a través de Bertold, de manera exacta. No nos importa que nos corten la flor. Ahí empezaron todos nuestros males.
Para alegrarle las navidades, voy aconsejarle unos vinos indispensables para estos días, tome nota:
- Tinto Realdecreto, de la bodega Pormishuevos, en la Ribeira Sacra de Lugo. Es un vino algo cabezón y narigudo, pero tomado en ponche, algo calentito, cura todos los males.
- Tinto Agrio, de las bodegas Alarma, de León. Se desconoce aún el precio de la botella, pero una fiesta es una fiesta!
Para el postre, le aconsejo un curioso vino dulce, Peñalcaba, de las bodegas de siempre. Resulta dulce y afrutado, manso, pero al paso por boca, se transforman todos sus azúcares dando como resultado un volcán de sensaciones tirando a brandy.
Le aconsejo encarecidamente no abusar de ellos.
Saludos.
Don Alfredo,
Me voy a tomar la anormalidad y la normalidad desde el punto de vista de la congruencia de los enunciados, y ateniéndome a las palabras. Me digo yo:
¿Hay algo más anormal que el hecho de que una fémina, la Señora Pajín, diga:
“Sólo faltaría que la ministra no pueda nombrar a quien le salga de los cojones”.
Tratándose de una ministra, pienso yo que lo normal sería que hubiera dicho:
“Sólo faltaría que la ministra no pueda nombrar a quien le salga del mismo coño".
Caueant consules ne quid Res Publica detrimenti capiat.
Hagan lo necesario los cónsules para que el Estado no reciba daño alguno.
que decían los Romanos para proclamar el Estado de Excepción.
Un abrazo normal, amigo Don Alfredo.
Antonio
Dices al final del post: "No soy jurista ni constitucionalista, tampoco se ponen de acuerdo entre ellos, pero creo tener algo de sentido común. ¿Esto es normal?
Yo me atrevería a poner entre paréntesis: (ANORMALIDAD)
Un abrazo.
Lo que no es normal es que siendo los capitostes zetapeicos tan romos y nefastos en todo tipo de saberes -ahí están sus palabros y sobre todo ahí están sus resultados- a la vez sean tan extraordinariamente duchos en marrullerias políticas. Con la militarización de una tacada consiguieron: que no se hablara de los duros recortes a sus consumidores favoritos, que no se hablara del desastre en que han convertido a una próspera Aena, de sus inversiones ruinosas en aeropuertos concedidos a constructores de la cuerda, de la privatización de Aena, hay que ser muy cínico para acogotar a un grupito social mientras se lo están llevando ellos muerto en mil y un caso de sobras conocido. Y encima conseguir que el cernícalo embajador de los Usa, como los wikileaks revelan, se derrita ante ASTUTO-FELINO-EN-LA-JUNGLA.
¿Es o no sr García Francés para tocarse los Pajines?
Saludos bloggeros
Efectivamente, D. César, pocos blogueros hay que tengan su espiritu optimista y por ello, y por su templanza, me recluyo en sus comentarios para serenarme algo antes de incendiar los míos.
No hay sociedad civil articulada, fuera de las "agencias de colocación" que son los partidos y sindicatos.
Dentro de nada volverán a florecer las antiguas "asociaciones de vecinos", los "centros de distribución de alimentos", los "grupos de trueque"... pero ya será tarde porque estaremos arruinados.
Al tiempo, querido. Y, aunque intentaré ser moderado en el consumo de sus protestas, no se lo puedo garantizar. Tanto es el deseo de evadir la realidad.
Voy a ver si encuentro imágenes de su propuesta y, en ese caso, podría dar a su recomendación rango de entrada.
Con todo afecto, amigo mío.
D. Antonio, cada día me hace usted reír más con sus comentarios. Se lo agradezco y seguro que también lo hacen los revisteros.
Ha retorcido la frase de la señora Pajín con todo el arte de un granaíno con talento. Al final, la ministra intenta epatar y acaba resultando bobamente autoritaria. Y machista.
Y, no sólo río sino que también aprendo algo cada día: la frase latina, incluso traducida, es hermosa en su rotundidad. Gracias, querido.
Con un fuerte abrazo, amigo mío.
Me ha jodido, D. Javier. Me la ha clavado. Es lo bueno, y lo malo, de tener comentaristas de ingenio tan astifino.
Con mi abrazo, buen amigo.
D.Alfredo porque ha escrito usted tanto (anormalidad..)..esque no lo entiendo..melosplica?????
Tiene usted razón, D. Jose Antonio, el PSOE es una máquina de propaganda muy bien engrasada aunque a veces sobreactúa y se nota demasiado entre los que seguimos diariamente la información.
Desgraciadamente, no este el caso del común de los ciudadanos quienes, en el mejor de los casos, sólo escuchan o leen un medio.
Un abrazo, amigo mío.
Aunque la aclaración pudiera ser innecesaria le prevengo, don Alfredo, que hay otro Javier que no soy yo, es el astifino.
Lo digo porque llevo mal las adulaciones y no quisiera quedarme con una que, además, no me corresponde.
Mis respetos a ambos.
Por lo demás sólo constatar que la mala reputación de nuestro sistema educativo no justifica la vuelta a “la letra con sangre entra”, del mismo modo que desaprobar los excesos de los controladores no significa, ni por aproximación, aceptar el proceder de nuestros gobernantes. En el terreno de las anormalidades considero mucho más deleznables los efectos que se quieren justificar que las causas que dicen provocarlos. Lo primero obedece a la idiocia y lo segundo a la naturaleza humana.
Saludos.
¿Ha dicho usted trueque, amigo? Hace tres años que lo vengo practicando. Algunos me pagan con cuadros, otros con arreglos domésticos...en fin, hay que adaptarse a los tiempos.
Maldita sea...Deberíamos poder importar políticos..Qué menos que un Belusconi, para poner algo de sensatez en esta maltrecha piel de toro..Tampoco estaría mal el pequeño Napoleón, tal vez arreglásemos lo nuestro de Ceuta y Melilla..O quizás el Presidente Griego, que ha salido entre los gobernantes mejor valorados.
Si es que está todo muy chungo,Sr. Francés, por eso voy a enviarle una entrada con diez vinos de menos de diez euros, para que las navidades no resulten ruinosas.
Saludos, joven!
D. Javier, admiro su moderación calificando de "excesos" los actos de los controladores. Un exceso es trincarte dos botellitas de Carraovejas. De lo que hablamos es de abrir las espitas a los toneles de la bodega. Claro, que usted me replicará que no se debió haber dajado la bodega abierta.
Coño, pero es que entraron con palanquetas!
Don César,
Yo preferiría ser un poco más patriota: en lugar de proponer a Berlusconi, al Griego, a Napoleón, y a todos esos, ¿por qué no buscamos a alguien que sea de nuestra Piel de Toro, como bien la llama Vd.?
Yo propondría al Cid Campeador. Creo que lo de Ceuta y Melilla y todo lo referente a la morería lo arreglaba de un plumazo, o de un espadazo.
Y hay que darse prisa, porque ya tenemos al del bigote y el puro y la guerra de Iraq amenazando con volver para arreglar España.
Otra cosa: veo que Vd. tiene buen dominio de los vinos. ¿Qué le parecería el canje de una docena de botellas de buen tinto por dos docenas de frases en Latín?
Reciba un abrazo, Don César,
Antonio
Por cierto, D. Antonio, la cantante ALASKA, declara en defensa de
Intereconomía, y apoya su dictamen sobre la señora Pajín.
"Si tengo una televisión hablo de lo que me sale del coño", dice la artista.
Es curioso que seas más precisa, o es que le ha leído a usted, Alaska que Dª Leyre. Coño, señora ministra.
Un abrazo, amigo mío.
Disculpen, amigos, tengo día de madre. Luego les respondo.
Tal como digo en mi última entrada, pueden y deben prolongar el Estado de Alarma. Y no pararse en los controladores sino continuar por ese camino, militarizando a todo funcionario culpable de haber perjudicado a los ciudadanos. Es el comienzo de una nueva era. Y será ¡gracias a ZP, Rubal y pepiño!¡¡MUY BIEN!!
Al contrario de lo que yo pensaba, son los propios socialistas los que adecentarán el País.
¡¡¡BRAVO por ellos!!!
La verdad, Don Alfredo: Si la cantante ALASKA me ha leído, cosa que desconozco, me da igual. Para seguir con el tema que tratamos, yo diría que me la suda, o que me la lleva floja. A mí lo que me sube la autoestima es, como bien puede imaginarse, que me lea Vd., Don Alfredo, y el resto de contertulios y contertulias.
(¡Coño! ¡Qué mal suena esto de contertulias!, porque parece que está uno hablando de espacios televisivos, y no de encantadoras féminas seguidoras del Blog Revista.)
Bueno, que este blog es de lo más divertido que circula por el espacio cibernético.
Y Don Cesar sigue sin contestar a mi propuesta sobre el intercambio de botellas de tinto por frases en Latín.
Don Alfredo, no se vea Vd. obligado a contestarnos a todos los comentarios, si otros quehaceres se lo impiden. Tómese Vd. las cosas con calma.
Un abrazo,
Antonio
D. Antonio, es usted un fenicio de mucho cuidado! Menudos trueques propone. Si yo fuera la mitad de fenicio que usted aceptaría con una condición: que escriba usted cada una de las doce frases en latín en sendos billetes de diez euros y me los envíe!
Pero olvidemos los trueques y mándeme usted su dirección a la mía y veremos qué podemos hacer.
Manda carallo...
Nos retrotraemos a tiempos pasados, y a mi lo que me causa estupor es la aceptación de la sociedad a medidas de caracter excepcional con esta cortedad de miras.
¿Alguien imagina en cualquier país de la UE solucionar un conflicto laboral con 2.200 trabajadores metiendo al Ejército por medio?.
Este Gobierno está finiquitado pero en absoluto va a dimitir o plantear elecciones anticipadas.
A mi lo que me inquieta son todas estas medidas extemporáneas, fuera de lugar, antiliberales y liberticidas que la sociedad mayoritariamente acata de manera bovina.
Si esto lo llega a hacer Aznar hablan de golpe de Estado y salen a la calle a derrocar al Gobierno.
Don César,
Es Vd. genial: lo de fenicio me encanta. ¡Qué riqueza de lenguaje! ¡Qué barbaridad! No lo había oído nunca en el sentido de buen negociante, pero, a partir de ahora, lo voy a utilizar veinte o treinta veces cada día.
Vamos a ver: lo de cambiar una frase en Latín por un buen tinto sería una cosa meritoria y más que meritoria por su parte. Vd. entiende de vinos, pues eso, envía vinos. Yo entiendo de frases, pues eso, le envío frases a mansalva.
Si Vd. me condiciona el envío de los tintos a que se los pague, ya nos estamos convirtiendo los dos en Empresarios: creo que eso es peligroso, porque luego vienen las huelgas de los empleados, los impuestos, la crisis, y qué sé yo.
Seguiré pensando para ver cómo desarrollo más todavía mi condición de fenicio y me consigo algo líquido.
Le envío un abrazo,
Antonio
Qué razón tiene usted, Dña Natalia. Nadie debería conculcar los derechos de nadie. También tiene razón en que en ningún país de europa pasaría esto. Desde hace tiempo, todos los gobiernos, han venido trabajando para que no ocurra. Todos los gobiernos. Aunque creo haber leido que en algún país se armó la marimorena por una cosa parecida. En fin, que tiene usted razón, no bebimos haber llegado a esto.
Pero hemos llegado. ¿Les mandamos una cestita de Navidad a los controladores?
Le aseguro, con todo respeto, que unas horas antes de decretarse el estado de alarma, yo ya estaba alarmado. Muy alarmado.
En mi fuero interno pienso que se le hará pagar esta decisión al gobierno por más que ahora la mayoría la consienta. También en mi fuero interno barrunto que la mayoría está de acuerdo porque, tal como se desarrollaron los acontecimientos, no había otra salida.
Al intentar pensar en los derechos de todos, algunas veces le doy la razón a usted, algunas otras veces no.
Amigo Don Cesar,
Por su comentario en el espacio de Don Alfredo, en el que Vd. dice que dejemos los trueques, tengo que entender que Vd. está dispuesto a enviarme no una, sino dos docenas de buenos tintos, así por la cara, gratis et amore. Yo se lo agradezco mucho, de verdad, pero también entiendo que su economía no debe ser tan holgada, como para poderse permitir esos lujazos. Le sugiero que esperemos un poco a ver si nos toca el Gordo de la Lotería, y entonces Vd. podría enviarme, no dos docenas, sino incluso tres, y yo podría corresponder adecuadamente con papeles verdes, o del color que fuese.
En cuanto a lo que comenta en mi blog sobre la frase Veni, uidi, uici, tengo que decirle que Vd. ha tenido la suerte de tener buenos profesores de Latín, pues la pronunciación que con toda seguridad tuvo Iulius Caesar, su tocayo, fue ueni, uidi, uiki. Si Vd. pronuncia así, pues mantenga esa pronunciación, que es muestra de sólidos conocimientos en Latín. En cuanto a lo que le sugería la última palabra, pues, eso, que a Vd. le sugería lo mismo que a todos los demás, el nombre de una fémina bien totada con un una buena perspectiva de hacer algo por ella.
Reciba Vd. mi admiración por su sentido del humor y la ironía, y un amistoso abrazo.
Antonio
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